Entrevista a Dña. Izaskun Landaida Larizgoitia, Directora Emakunde-Instituto Vasco de la Mujer
Diplomada en Graduado Social por la UPV-EHU y Máster de Agente de Igualad por la Universidad de Valencia, Dña. Izaskun Landaida Larizgoitia comienza en 1995 su labor en la administración pública como Concejala de Igualdad y Acción Social además de Teniente de Alcalde del Ayuntamiento de Ugao-Miraballes, hasta que en 2007 se convierte en la primera mujer alcaldesa de su municipio.
Miembro de la Ejecutiva de Eudel desde ese nombramiento, ha sido la responsable política del Área de Igualdad, por lo que ha participado, entre otros foros, en el Consejo de Dirección de Emakunde, en la Comisión de Seguimiento del II Acuerdo Interinstitucional o en el Observatorio de Violencia de Bizkaia. Hasta el 2007 compagina la labor de concejala con el trabajo en la empresa privada.
Los resultados del programa Berdinbidean está permitiendo conocer las necesidades de los municipios con población inferior a 5.000 habitantes. ¿Estas demandas difieren de las constatadas en las localidades del Territorio Histórico de Bizkaia con mayor volumen poblacional?
“Para atajar la violencia y desde su raíz hay que trabajar en prevención”
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Los municipios pequeños cuentan con menos recursos, en general, y para la implementación de políticas de igualdad, en particular. Por lo tanto, las estrategias para su desarrollo deben ser necesariamente diferentes a las de los municipios grandes. Por otro lado, en el caso de los municipios pequeños, el trabajo en red se hace incluso más necesario que en el caso de los grandes. En este sentido, las mancomunidades pueden jugar un papel muy relevante.
Además de esto, la realidad de la desigualdad en los municipios pequeños presenta características propias. Las características de la población, la ordenación del territorio y el grado de descentralización de determinados recursos y servicios difieren según el tamaño poblacional. Las relaciones sociales también son diferentes y, por tanto, también las relaciones de género. Todo ello va a condicionar el tipo de necesidad y el tipo de demanda en materia de igualdad.
Tras su inscripción al Departamento de Interior durante la pasada legislatura, la atención a las víctimas de la violencia de género se convierte en competencia de Emakunde, ¿qué fundamenta la reincorporación del tratamiento de la violencia a las atribuciones del Instituto?
La incorporación de las competencias de la Dirección de Atención a las Víctimas de violencia de género a Emakunde supone básicamente la ratificación de que la violencia de género es un problema al que hay que hacerle frente desde las políticas de igualdad.
“Trabajar por el empoderamiento de las mujeres, porque puedan alcanzar su autonomía económica, por el cambio de estereotipos y roles que impiden la igualdad real y efectiva”
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La violencia es la consecuencia más grave y sangrante de la desigualdad entre mujeres y hombres; por lo tanto, hay que intentar combatirla dentro del paraguas de las políticas que favorecen la igualdad de mujeres y hombres. Por supuesto que hay que tratar de prestar la mejor de las atenciones a las mujeres víctimas de violencia de género así como establecer las necesarias medidas de seguridad y todo ello de una manera especialmente coordinada con todas aquellas instituciones y entidades que participen en la solución del problema.
Pero para atajar la violencia y desde su raíz hay que trabajar en prevención. Trabajar contra la violencia de género es trabajar por el empoderamiento de las mujeres, trabajar porque puedan alcanzar su autonomía económica, trabajar por el cambio de estereotipos y roles que impiden que actualmente se dé una igualdad real y efectiva.
Cuanta más igualdad, menos violencia de género. Ahora estamos en el proceso de estructurar y de ordenar esas nuevas competencias dentro de nuestro Instituto.
¿Adoptará Emakunde, bajo su dirección, un enfoque vanguardista sobre la igualdad de mujeres y hombres?
Personalmente pienso que Emakunde siempre ha tenido un carácter vanguardista. Emakunde ha sido pionera y un referente en materia de igualdad durante sus 25 años de existencia.
“Emakunde siempre ha tenido un carácter vanguardista”
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El Instituto Vasco de la Mujer ha fortalecido en este tiempo estructuras para trabajar a favor de la igualdad en las administraciones públicas, ha formado a las personas para que sean capaces de impulsar políticas de igualdad dentro de las administraciones, ha creado redes de trabajo entre las diversas instituciones, ha impulsado la creación de ámbitos privados en los que se trabaje a favor de la igualdad de mujeres, ha impulsado la participación del movimiento asociativo de mujeres y ha marcado las líneas de trabajo a seguir a través de sus planes de igualdad.
Como integrante del Pleno del Observatorio de la Violencia de Género en Bizkaia durante los últimos cinco años, ha sido testigo y agente del proceder del organismo. ¿Qué aspectos evolutivos subrayaría al respecto de su actividad?
“La labor realizada por el Observatorio de Violencia de Bizkaia puede considerarse un ejemplo de buenas prácticas”
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Destacaría sobre todo la sistematización de los datos que año tras año se va consolidando. A día de hoy, el Observatorio es una referencia para la consulta sobre temas relacionados con la Violencia, no sólo en Bizkaia, sino también en otros Territorios. Instrumentos como el Atlas o el informe de cifras se han convertido en referentes al tiempo que, para los entes informantes, la devolución de la información que se hace desde el Observatorio implica una herramienta de gran valor para el trabajo interno.
Pronóstico sobre la pervivencia de dos observatorios de la violencia contra las mujeres: el autonómico y el foral de Bizkaia.
Creo que hay que valorar muy positivamente la labor realizada por el Observatorio de Violencia de Bizkaia, tiene ya una trayectoria y puede considerarse un ejemplo de buenas prácticas. Desde Emakunde nos interesa tener una visión de los tres Territorios cuando hablamos de los datos relacionados con la violencia contra las mujeres y nos parece interesante unificar criterios de recogida de información, etc. Este asunto debe tratarse en el seno de la Comisión Interinstitucional en el que se debe estudiar como aunar esfuerzos y recursos.
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