Un estudio del Instituto Politécnico de Leiria (Portugal) señala que el 88,5% de los y las menores de entre 10 y 15 años lleva a cabo prácticas relacionadas con el sedentarismo que, unidas a las malas posturas, pueden provocar molestias en la espalda.

Las personas expertas recomiendan la introducción de programas de educación postural en los currículos de Educación Física, ya que podrían influir en la salud física de los niños y la sniñas, así como una reducción del sedentarismo infantil, incentivando a los y las más pequeñas a realizar actividades divertidas, juegos y ejercicios que les permitan moverse una mayor cantidad de tiempo durante el día. Desaconsejan también el uso prolongado de pantallas.